Silvia C. Carpallo .
La circuncisión es una técnica que se asocia con prácticas religiosas o con problemas de fimosis, pero lo que no todos saben son los beneficios que puede tener para la salud y la vida sexual del hombre.
Uno de los motivos para realizar esta intervención en casos de fimosis es por hipersensibilidad, es decir, el glande, al estar siempre recubierto y no tener contacto con el exterior puede ser hipersensible, y por ello, al eliminar el prepucio y dejarlo descubierto, el roce en la punta del pene deja de ser molesto y pasa a ser más placentero. Esta es la idea más extendida, y por eso se considera que existe una gran discriminación entre esta práctica, que intenta influir positivamente en el placer del hombre. Aun así, la percepción del placer siempre es algo subjetivo de la persona, así lo explica el urólogo del Hospital Puerta de Hierro de Madrid, Ignacio Martínez Salamanca. «Depende de cada paciente, si tenía una fimosis importante y su glande nunca quedaba expuesto, pueden cambiar las sensaciones, pero no en otras situaciones, ya que la fimosis quita mucosa y algunos pacientes refieren que sienten menos».
En la mujer
El secretario general de la Federación Española de Sociedades de Sexología (FESS), Miguel Ángel Cueto, explica que «cuando la corona se encuentra estimulada, las sensaciones que experimenta son lentas, cálidas y muy ricas en calidad. Entre los hombres circuncisos el frenillo tiende a ser la parte más sensible de su pene y el glande la mayor fuente de placer». Otra cuestión es si el pene circuncidado afecta o no al placer de las mujeres. Según Cueto, «la mujer no es capaz de discriminar, durante el coito, esta diferencia ni interviene en su satisfacción sexual y no importa tanto el que esté circunciso o no su pareja, sino el factor emocional que le une a ella». Pese a esto, la preferencia entre un pene circuncidado o no es una cuestión más visual subjetiva y esto puede observarse en los foros de internet en el que múltiples féminas se hacen la famosa de pregunta de «¿con o sin?».
Si las famosas chicas de «Sexo en Nueva York» comentaban, en un capítulo que los prefieren sin esta piel –que algunos llegan a considerar un órgano vestigial como el apéndice o las muelas del juicio–, hay que tener en cuenta que se trata de un factor cultural. Pero, más allá de la percepción del placer, lo que sí supone una gran ventaja en la circuncisión es lo referente a la salud sexual. Por una parte, circula el pensamiento de que tener el glande descubierto permite una mejor higiene, ya que la zona es más accesible. Martínez Salamanca especifica que «esta afirmación sólo es correcta si se habla de fimosis que no permiten retraer el prepucio. Hay otras que aunque tengan anillo fimótico permiten parcialmente la exposición del glande».
Leer más: Los circuncisos gozan más http://www.larazon.es/historico/1807-los-circuncisos-gozan-mas-PLLA_RAZON_284391?sky=Sky-Agosto-2017#Ttt1pAE2i2RbTjny